Compañeros de la Deutsche Welle: pongamos fin al kristallnacht en Venezuela



Publicado: 25/04/2017 01:08 AM

Recientemente hemos visto con preocupación como la cadena estatal Deutsche Welle ha venido parcializando su línea editorial en contra del Estado venezolano y en contra de los movimientos sociales afectos a la Revolución Bolivariana, equiparándose con emporios informativos tendenciosos como Time Warner (CNN), Fox, ABC y otras cadenas privadas que responden a los interéses de los cárteles empresariales que han impulsado feroces guerras en Oriente Medio, Europa Oriental, África y Asia.

Hasta hace unos meses, la cadena alemana de había venido informando con una línea editorial crítica al Gobierno Bolivariano, sin embargo, en casi todos sus reportes daban cabida al contraste de las vocerías revolucionarias, dejando así una sensación de equilibrio informativo.

No obstante, en lo transcurrido del mes de abril de este 2017, cuando precisamente comenzó un paroxismo de violencia por parte de la derecha venezolana e internacional en contra de Venezuela, la Deutsche Welle ha venido informando de manera muy parcializada en contra del Estado venezolano y de los movimientos sociales afectos a la Revolución Bolivariana.

Captura de pantalla 2017-04-24 a las 23.30.54

Queremos referirnos en primera instancia a un editorial al que la estatal alemana tituló "Venezuela: la mala costumbre de censurar a la prensa", que contiene un compendio de acusaciones de otros editoriales realizados por el diario El Tiempo de Colombia, país en el que precisamente informar y denunciar la corrupción se ha convertido en una aventura que le puede costar la vida a los periodistas, caso reciente de Sergio Monsalve Rojas, quien fue amenazado de muerte por denunciar corrupción en el municipio antioqueño de Chigorodó.

En ese mismo editorial, la agencia alemana se refiere a un tendencioso ranking de países respetuosos de la libertad de prensa creado por la ONG Reporteros Sin Fronteras (RSF), en los que colocan de último a Venezuela por debajo de países como Colombia, EEUU, México e Israel, donde hay muchos casos comprobados de desapariciones forzadas, sicariatos, detenciones ilegales y tortura a periodistas. En nuestro país, el único periodista asesinado en los últimos 4 años ha sido Ricardo Durán, creyente y militante del Socialismo del siglo XXI del cual Deutsche Welle se refiere tan despectivamente en su reporte.

En efecto, en los últimos días se han presentado agresiones y acoso violento al ejercicio periodístico en Venezuela, pero ha sido por parte de los que la Deutsche Welle denomina "manifestantes pacíficos", que han sido vehículo del odio y la intolerancia que paradójicamente han inoculado las empresas de comunicación en todo el orbe. Para citar algunos ejemplos:

Nosotros también tenemos en cuenta que la periodista Elyangélica González denunció agresiones por parte de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), hecho que fue investigado y resultó que la periodista fue retirada de una zona de seguridad del Tribunal Supremo de Justicia, para lo cual se requirió de personal femenino GNB para mover a esta comunicadora quien presentó resistencia a la orden de desalojo. En ningún momento hubo saña o violencia por parte del personal militar, más allá de un forcejeo.

El odio y la intolerancia

Del odio y la intolerancia debe saber mucho los periodistas y editores de la Deutsche Welle, ya que inferimos que en su mayoría provienen o han convivido con el Pueblo alemán, quien precisamente estuvo al borde de la extinción por la expansión del nazismo y fue objeto de ensayo del más perverso adoctrinamiento que naturalizó la violencia en el seno de su sociedad, al punto de deshumanizar a cualquiera que no compartiera o no formara parte de ese ideal: los judíos, los comunistas, los gitanos, los inmigrantes y los discapacitados, alemanes o no, lo sufrieron.

Y es preciso hacer énfasis en este último punto, porque hoy una parte de la población venezolana está siendo afectada por un adoctrinamiento parecido y otra parte de la población está sufriendo las consecuencias. Hoy en Venezuela estamos viviendo una kristallnacht (noche de los cristales rotos) permanente, donde padecemos linchamientos, asesinatos, amenazas y expresiones de odio constanstes:

Enumerar todos los casos y ejemplos de odio e intolerancia nos llevaría una decena de artículos, además que hemos omitido imágenes de personas asesinadas, por respeto. Sin embargo, nuestra intención (y esperamos que sea también la de Deutsche Welle), es de parar la violencia, el odio y la intolerancia que en el pasado hundieron a Alemania y a toda Europa en la peor calamidad de siglo XX, dejando un saldo de más de 60 millones de muertos y que comenzó a raíz de la "inofensiva" propaganda.

No subestimemos nuestros actos, una nota de prensa puede ser la diferencia para entrar en una guerra.

  CON EL MAZO DANDO

Comparte esta noticia: