Un 30% de los productos de la cesta básica venezolana son distribuidos de manera ilegal en Colombia
Publicado: 30/08/2015 03:15 PM
El pasado viernes 28 de agosto de 2015, en la frontera Colombia Venezuela, el Director General de Administración y Finanzas, Raúl Carreño, informó desde el Puente Simón Bolívar que luego del inicio de la Operación Liberación del Pueblo (OLP) en los seis municipios fronterizos tachirenses se han realizado más de doscientas cincuenta (250) inspecciones que han permitido disminuir las colas en los comercios y en las estaciones de suministro de gasolina, así como acabar con el acaparamiento y la especulación.
Alrededor de 100 fiscales desplegados en la zona limítrofe de la Región Andina inspeccionaron más de 250 locales para evitar el contrabando, teniendo como resultado 70 toneladas de alimentos que estaban destinados al contrabando en el suroeste del estado Táchira.
Desde el inicio de este despliegue, el abastecimiento de productos aumentó tras la operación de la Superintendencia para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (SUNDEE), como parte del operativo de seguridad decretado por el Presidente Nicolás Maduro para combatir las actividades ilícitas en la zona limítrofe.
De igual manera, explicó que los alimentos incautados fueron redistribuidos en el sector y anunció que profundizarán en los próximos días las inspecciones de los grandes centros de distribución para garantizar que los productos lleguen a los venezolanos a precios justos.
Posteriormente, el Mayor General Efraín Velasco Lugo, jefe de la Región Estratégica de Desarrollo Integral (REDI) de los Andes, afianzó que el operativo pretende reflejar al mundo y a toda Suramérica la realidad en la zona fronteriza, donde se han detectado diversos delitos, entre ellos el paramilitarismo exportado del vecino país Colombia.
Explicó que las deportaciones de los ciudadanos colombianos, se realizó al constatar que no poseían ningún tipo de documentación y que muchos de ellos estaban participando en el contrabando de extracción.
Puntualizó que el sector conocido como “La Invasión” estaba controlado totalmente por paramilitares, que extorsionaban a las familias tratando de imponer una agenda de terror en la frontera común.
Citó, debe ser precisó el trabajo binacional, que permita atacar estos delitos a tiempo, y recalcó que si de parte del gobierno colombiano existiera una seguridad constante en las zonas fronterizas no estuviéramos viviendo estos ataques contra la economía y seguridad de nuestro país.
TELESUR