Comandante Walter

Abdel Nasser, Yawarharlal Nehru y Josip Broz Tito

Publicado: 09/05/2020 04:10 PM

¡HERMANDAD y UNIDAD!: Con el canto al unísono de  este himno de guerra, el obrero metalúrgico, Josip Broz Tito, supo mantener la sólida confraternidad del ejército partisano en las montañas y la unidad de una nación signada por siglos de antagonismos religiosos y diferencias étnicas, políticas y raciales. Cuatro décadas después de su partida, en su centro memorial de Belgrado,  acuden más de treinta mil de sus seguidores, provenientes de todos los rincones de la península balcánica, para rendir tributo y serenatas al héroe-estadista de una revolución añorada, cuyos progresos, bienestar económico y estabilidad social fue obra indiscutible de su liderazgo.

Con este himno de batalla el Comandante Walter  (su nombre clave en la clandestinidad) mantuvo la moral en alto de sus tropas y  derrotaron a 22 temibles divisiones de la Werhmacht - fuerzas conjuntas de la aviación, marina y ejército nazi - , tropas del ejército italiano y colaboracionistas chetniks. Igualmente vencieron a la burguesía traidora, aliada incondicional del nazismo monárquico  yugoslavo. Pero para el héroe de las batallas de SUTJESKA y NERETVA, su obra más grande fue la Organización de Países no Alineados, no obra de la fuerza, ni de las armas, sino de la concordia y la inteligencia humana.  La victoria de la paz sobre la guerra.

Como Secretario General del Partido Comunista Yugoslavo  su ejército de militantes, obreros y campesinos no eran un conclave de ambiciones y divergencias, sino una comunidad de esfuerzos, afectos, disciplina y entendimientos. Maestro diestro en el uso de la mano izquierda. Era hombre de montañas, no caía en trampas de comidas envenenadas y evadía siempre las emboscadas que le tendieron para ser atrapado por  las redes de sus enemigos y  de poderes fácticos extranjeros.

Durante la 1ra Guerra Mundial fue soldado raso, en la II Guerra Mundial fue comandante del pueblo en armas.  A partir de 1920 se destacó en  el servicio de inteligencia soviético donde se le conocen más de un veintena  pasaportes e identidades ficticias. 

El joven Tito, en 1936, organizó las Brigadas Internacionales de Yugoslavia que lucharon a brazo partido al lado del ejército republicano  contra el golpe de estado fascista  que desencadenó la Guerra Civil Española. Ese mismo año asumió la Secretaria General del Partido Comunista yugoslavo y secundó sin reservas las políticas del camarada Josep Stalin. Desde agosto de  1941 cuando  Hitler invade a Rusia, dirige la legendaria resistencia yugoslava, histórica por las batallas y tácticas guerrilleras que fulminaron al Tercer Reich.

EL FRENTE ORIENTAL: La fábrica de fábulas  hollywoodense se ha   encargado de hacer mitología de  la resistencia surgida en Francia y la heroicidad de los aliados en el día “D”,  lo cual es una creación meramente fílmico-farandulera.  Se resalta una cinematografía encargada de mistificar las virtudes de los marines  contra los nazis. Grandes puestas en escena sobrecargadas de buenos y nobles gringos contra malvados alemanes; cuando en realidad fueron  los partisanos yugoslavos y el ejército rojo ruso, en el frente oriental, los que ganaron la II Guerra Mundial.  Más de treinta millones de soldados rusos y un millón y medio de yugoslavos dejaron sus vidas en los campos de Europa.  Todos comunistas. Se cumple este 9 de mayo 75 años de la victoria definitiva del Ejército Rojo sobre el eje nacional fascista. Estas tropas derrotaron a Hitler, tomaron Berlin, hicieron la batalla cuerpo a cuerpo en LeningradoEso no consta en los 75 años de filmografía hollywoodense.

En ninguna parte del continente europeo ocupadas por las avanzadas alemanas e italianas ocurrió una resistencia patriótica, tan decida, eficaz y  bien organizada como la comandada por el Comandante Walter en Yugoslavia. Durante  cuatro años (1941-1945) tuvo que combatir en dos frentes opuestos; un frente de sus milicias partisanas donde se desarrolló una cruenta campaña guerrillera contra alemanes e italianos, y  al mismo tiempo peleaba contra el frente interno de los  colaboracionistas yugoslavos apoyados por la monarquía local, Hitler y Mussolini.

Desesperados, Hitler puso precio la cabeza del guerrillero en 600.000 marcos de oro, Mussolini emitió una orden de captura…., y el Papa Pio XII lo excomulgó como oveja negra y anti cristo. La SS destinó grandes recursos para tratar de matarlo, el Führer se apersonó del asunto denominándolo “operación Alfil”. Para ello designó  al jefe de las operaciones especiales de la Gestapo, Gral. Otto Skorzeni quien frente a tropas de paracaidistas aerotransportadas,  estuvo a punto de capturarlo en un bunker de montaña que los partisanos habían construido para su jefe guerrillero.

Tito logro escabullirse por un túnel secreto que lo condujo a un arroyo, junto con su perro Tigar, su secretaria Zdenka y su estado mayor.  Los paracaidistas y la SS  llegaron minutos tarde pudiendo inclusive encontrar en el pueblo cercano un  uniforme de Tito y parte de sus efectos personales. Cuando Hitler leyó el reporte sobre lo ocurrido monto en cólera y   expresó: “De haberlo capturado lo hubiera fusilado de inmediato pero  también lo hubiera enterrado con honores militares.”

La guerrilla partisana convirtió las montañas yugoslavas de Bosnia - Herzegovina en un verdadero infierno para la Wehrmacht. Siendo un frente secundario, Hitler se vio obligado  a enviar a   22 de sus mejores divisiones con más  300.000 efectivos. La fiereza de los combates distrajo  contingentes nazis que eran imprescindibles en el frente ruso. Las fuerzas que el führer  destinó a los Balcanes  fueron derrotadas por las complicadas maniobras de emboscada del joven guerrillero en Los Balcanes.

Finalmente,  en octubre de 1944, Tito entró a la ciudad de Belgrado como Libertador de Yugoslavia. Terminada la guerra los conflictos internos no cesaron por obra de realistas monárquicos y colaboracionistas nazis.

Tito se distanció de Moscú y enrumbó su país hacia un sistema de socialismo independiente autogestionario, devino así en un proyecto endógeno, creó  el comunismo sin Stalin. Como obrero metalúrgico  supo organizar unidades de producción, cooperativas obrero campesinas que asumían los costos  ganancias y pérdidas de sus empresas. y La inventiva propia y  la fuerza de trabajo organizada  contribuyeron  a un  alto crecimiento económico y  incremento de la productividad y  las exportaciones.

Para esto el naciente estado yugoslavo tuvo que otorgar el derecho de propiedad a estas comunidades organizadas de la   pequeña, mediana y gran economía;  contrario a los designios, dogmas políticos  y  órdenes emanadas del Kremlin. Se reforzó con este experimento un socialismo de carácter humanista, se exaltó el espíritu comunitario del pueblo  yugoslavo y se logró un notable mejoramiento en la calidad de vida.

Entre 1946-1949 Tito  apoyó al Partido Comunista griego en la guerra que  libró contra la monarquía de ese país, gracias a las baterías antiaéreas yugoslavas cinco aviones norteamericanos fueron derribados.

PADRE DE LA ORGANIZACIÓN DE PAISES NO ALINEADOS: Todas las reuniones preliminares para la conformación de un bloque de naciones no alineadas las organizó personalmente  Tito en la residencia presidencial de la Isla de Brioni. Uno a uno invitó a este enclave a todos los dirigentes que posteriormente convocaron la primera conferencia en Bandung. Fue anfitrión de Abdel Nasser, Yasser Arafat, Yawaharlal Nehru, Indira Gandhi, Sukarno

En 1961, en su carácter de primer Secretario General,  convocó en la ciudad de Belgrado la primera reunión de la Organización de los Países No Alineados. Sentó el ABC de los presupuestos filosóficos y principios ético-fundacionales de la organización:

A) Un sistema internacional basado en la paz como instrumento de progreso y entendimiento entre las naciones;  B)  la no proliferación de armas nucleares; C)  el desarme de las potencias, D) la no inherencia ni intervención de  potencia alguna en asuntos internos de otros países; E) la libre autodeterminación de los pueblos; F) La inmediata descolonización de todos los continentes oprimidos por las potencias Europeas y los Estados Unidos. Sentó  las bases de un Nuevo orden Mundial.

EL MILAGRO DE LA UNIDAD YUGOSLAVA: Por más de cuarenta años el Mariscal Tito logro consolidar más de mil años de enfrentamientos y divisiones entre Serbia, Croacia, Bosnia, Montenegro, Macedonia , Kosovo y Eslovenia .  La península balcánica fue territorio de paso, escenario  donde originariamente convergieron los pueblos Yugs y los Eslavos del Sur. En subsecuentes períodos históricos fue la encrucijada obligatoria de la historia de Europa.  Primero dominaron los griegos, luego romanos, bizantinos, otomanos y austrohúngaros.  Sobre un territorio en común  se encuentran cinco idiomas, dos alfabetos (latino y cirílico) y cuatro religiones en pugna permanente, lo cual es causa  de la fragmentación  y  fraccionalismo acentuado de esa región. Al reventar la II Guerra Mundial las facciones pro monárquicas y pro nazis provocaron una cruenta guerra civil, sobre la cual se impuso Tito con sus partisanos anti fascistas. Luchó en el frente externo contra Hitler e internamente contra los partidarios de este último.

Mantener unidas tal diversidad de caracteres, con un nivel y calidad vida superior, libre de analfabetismo, educación libre y gratuita,  servicios médicos y seguridad social universal, y libertad para la práctica religiosa de todos los cultos fue el gran milagro del Mariscal Tito.

 El rencor y la envidia visceral de la arpía imperial norteamericana y el cinismo europeo contra el gran Mariscal Tito y su magna obra (La Organización de los Países No Alineados y  la unificación monolítica  de Yugoslavia) fue tal que once años después de su muerte comenzaron a aplicar la “teoría de la grieta”. Agudizaron las tensiones, armaron facciones, avivaron las diferencias y devino  las rupturas.  La Guerra de los Balcanes contrajo  bombardeos masivos, masacres selectivas  y limpiezas étnicas, auténticos genocidios ejecutados a manos libres siguiendo el manual de las SS.

La balcanización  o la poli fracturación  de las naciones para disolverlas y controlar sus recursos es una de las fórmulas que acarician los centros de poder fáctico de Estado Unidos y Europa contra la República Bolivariana de Venezuela. Pero morderán el polvo de la derrota y las miserias de sus prácticas genocidas se les devolverán como un boomerang contra el rostro.

Este 04 de mayo se cumplieron 40 años la partida física del Mariscal Josep Broz Tito, la realidad excede a la ficción cuando se trata de cerca los eventos que describen su vida.

La catástrofe sucedida después su muerte no habría ocurrido si  la fuerza moral revolucionaria, su legado, símbolos y su organización político - social hubiesen sido sostenidos por sus seguidores. Las divisiones internas y el cerco de las potencias extranjeras disgregaron Yugoslavia, más todas sus fórmulas de cooperación internacional siguen vigentes.

El 07 de mayo es el aniversario 127 de su nacimiento. En honor a  su memoria valoramos sus ejecutorias como hombre de Estado, obrero metalúrgico, político, luchador social y soldado incansable,  levantando la voz de su canto de amistad entre los pueblos:  

¡HERMANDAD Y UNIDAD!

 ¡DIOS, PATRIA Y REVOLUCIÓN! ¡VENCEREMOS!


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