Publicado: 11/07/2016 06:00 PM
El afamado cantante puertorriqueño, René Pérez Joglar, mejor conocido como Residente, usó la red social Twitter para dejar en claro la reacción que le produjo una campaña -que a través de la misma vía- impulsó este fin de semana la derecha venezolana.
Más elocuente no pudo ser la solicitud del cofundador del trío isleño
Calle 13, ante una etiqueta denominada
#liberenapanchoygabo. "Alguien me puede explicar de que se trata esto", se lee textualmente en su cuenta
@Residente.
La confusión del rapero es fácilmente explicable para quien indague y descubra el propósito del eslogan promocionado por quienes apoyan la transgresión de normas y leyes, pues,
#liberenapanchoygabo fue el sainete con el que se intentó encubrir una de las más recientes jugadas desestabilizadoras de la oposición.
Residente, quien ha sido víctima de las mismas redes sociales (en septiembre se afirmó que había sido asesinado), ignora seguramente que
Pancho y Gabo con los motes de
Francisco Márquez y Gabriel San Miguel, -dos activistas del partido ultraderechista
Voluntad Popular- quienes el 19 de junio fueron capturados en el estado Cojedes con una gruesa suma de dinero en efectivo que en su momento no pudieron justificar ante la
Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Para el también cantante y compositor, tampoco debe ser familiar que
Pancho y Gabo son colaboradores inmediatos de
David Smolansky, alcalde del municipio El Hatillo, quien en mayo declaró a la
Radio Nacional de España que Venzuela se caracteriza por ser narco-petro-estado-militar, sin presentar la mínima prueba.
El autor del tema
Querido FBI, debe ignorar que la alta suma en poder de Márquez y San Miguel (que los mantiene en proceso judicial por supuesta legitimación de capitales), se queda pequeña si tomamos en cuenta lo que este domingo escribió el prestigioso periodista
Eleazar Díaz Rangel, en el diario
Últimas Noticias: "Hace poco decomisaron dos millones y medio de bolívares a militantes de oposición que nunca explicaron de dónde lo sacaron y cuál sería su uso, y ahora la suma es mayor, cuatro millones. Es evidente, son remesas en dólares enviadas para desestabilizar cambiadas en bolívares".
Finalmente, si
René Pérez Joglar estuviese al tanto de todo esto, pero igual leyera las exigencias de libertad para los imputados, escribiría mil veces: "Alguien me puede explicar de que se trata esto".
