Padre Numa fue quien ubicó el milagro que selló la beatificación de José Gregorio Hernández
Publicado: 28/10/2020 11:01 AM
Este lunes inició el proceso de exhumación del Dr.
José Gregorio Hernández para su beatificación en el primer trimestre de 2021,
pero las dos personas que hicieron posible la difusión del milagro no
estuvieron en la ceremonia, siendo otros los que en pantalla figuraron.
Uno de ellos es el neurocirujano Alexander
Krinitzki quien operó a Yaxury Solórzano, la niña sanada por José Gregorio
Hernández que cuyo acto prodigioso impulsó el proceso de beatificación del Santo
del Pueblo, fue excluido de la ceremonia de exhumación del Venerable porque supuestamente
podría “lastimar las intenciones de
algunos que quieren ganar indulgencias con escapulario ajeno”, de esta forma
denunció el médico a través de una carta enviada al padre Numa Molina, quien es
principal difusor del milagro, tampoco fue invitado al evento.
En documento, Krinitzki señaló que fue Numa a quien se le ocurrió la
recuperación de Yaxury fuese un acto milagroso y tras confirmar la petición de
la madre al Santo del Pueblo comunicó el
hallazgo a los representantes de la causa del doctor
José Gregorio Hernández en el Vaticano, tras lo cual se inició la
investigación, según lo publicado por el Diario VEA.
“Esa es la verdad y cualquier otra cosa que alguien se atreviese
siquiera pensar sería una BLASFEMIA”, añadió el neurocirujano.
Por su parte, el padre Numa aprovechó la ocasión para “hacer honor al
médico que pudo experimentar de primera mano la asombrosa curación de una niña
que, según él, tenía comprometida” y a quien describió como “un hombre humilde
que no busca protagonismo”.
Además, agradeció “por haber podido ser un instrumento de Dios en la
ubicación del milagro” requerido para la beatificación del Venerable.
En este sentido, la jefa de gobierno del Distrito Capital, Jacqueline Faría, quien estuvo presente en la ceremonia agradeció la actuación el padre Numa por convertir ese milagro en realidad y criticó la actuación del Monseñor Baltazar Porras al polítizar el evento religioso.